Unos amigos se van a trabajar fuera del país y me acordé de que hace algún tiempo escribí un post con tips para hacer la maleta bien, y 'bien' significa que quepa toda la ropa que vamos a necesitar, algunos "por si acaso", varios pares de zapatos, el neceser, el ordenador portátil y varios manojos de cables, claro. Si quieres conseguir un vuelo barato tienes que renunciar a facturar una maleta, lo que significa que te mudas al extranjero y todo tu equipaje se reduce a un bulto de 56x45x25 cm, y por consiguiente tienes que hacer un Tetris de co**nes con tus pertenencias.

A lo que iba. Ojeando el post me di cuenta de un detalle que había pasado por alto y que no tiene nada que ver con viajar, si no con organizar la casa. No me mires raro que todo tiene su por qué.


Durante estos días de fiesta hemos estado sacando ropa de invierno y reorganizando armarios. Cavilando y sin que nadie me dijera nada (es decir, yo solita), he caído en la cuenta de que una buena forma de ordenar el armario es enrrollar la ropa, como haces al hacer la maleta. Primero se dobla de forma correcta, como normalmente se doblaría para meterla en el cajón, y luego se enrrolla. Si el truco para que quepa más ropa en una maleta está en enrrollar las prendas, y así además evitas que se arruguen, en el armario igual ¿no? Bueno, vale. Luego he mirado Pinterest y esto de hacer rollitos está más que inventado, pero ¿y lo bien que he dejado los cajones?